Lo primero es recuperar al paciente del grado de dolor agudo de sus músculos. Para ello nos valemos de antiinflamatorios, relajantes musculares y sesiones de terapias manuales como la fisioterapia y los masajes especiales, uno de los métodos más eficaces de nuestro gabinete, que cuenta con un protocolo para tratar esta patología mediante masajes de linfoterapia y digitopuntura.

Una vez que solucionamos el cuadro agudo de dolor del paciente, pasamos a determinar, según el avance del desgaste de las piezas dentales, si podemos tratarlo sólo con una férula de relajación o de descarga (estado inicial), y masajes, o si el paciente debe ser tratado de forma integral en todas sus piezas dentales (facetas de desgaste grado II y III).